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Se realizó en Roque Pérez el homenaje a los maestros en su día, brindando marco el recientemente restituido monumento de mármol ubicado en la plaza Mitre.

Estaban presentes el Secretario de Gobierno, José Luis Horna; la Secretaria de Coordinación y Gestión, Graciana Uruslepo; la inspectora jefe distrital, Viviana Gighlione; el presidente del consejo escolar, Fernando Duré; consejeros y un grupo de docentes.

Luego de entonadas las estrofas del himno nacional, fue colocada en el pie del monumento una ofrenda floral, estando a cargo de las ex inspectoras Susana González y Olga Albanessi.

Posteriormente, hizo uso de la palabra María Elena Bértola, quien al evocar la figura de Domingo Faustino Sarmiento dijo que "marcó rumbos en el quehacer educativo del país. Ser docente es tener una profunda vocación de servicio, porque trabajamos con la mejor materia prima que nos puede ofrecer un país, que son los alumnos. La tarea no es fácil, pero sí grata, tiene escollos en tiempos difíciles en donde la sociedad ha evolucionado y trae como consecuencia algunos problemas que los maestros estamos dispuestos a ayudar. También es cierto que somos una prolongación de la vida hogareña, porque estamos comprometidos a ayudar a nuestros niños a que puedan transitar la vida en lo sucesivo, enfrentando escollos, pero fortalecerlos para poder ir subsanando esos inconvenientes como ciudadanos de bien, comprometidos con su sociedad y su patria".

La docente afirmó que "es muy cierto que entregamos muchas horas de labor, pero no hay quejas, nunca al maestro le pesó trabajar por sus chicos. También es cierto, que más allá de ayudarlos y aprender a leer y escribir, a inducirlos para que puedan comprender la historia de su patria, y enseñarles la geografía de este hermoso país, lo que tratamos de hacer es abrir caminos para que puedan trabajar en el orden de los valores, que sean buenas personas. Lo importante es que reflexionemos todos en este día tan especial, y que nuestra labor continúe cotidianamente, estemos o no, trabajando en las escuelas. Hace varios años que estoy jubilada, y un poco en broma y en serio, digo que somos retiradas de la docencia activa, porque el que es maestro de vocación aunque no esté en un aula, no deja de seguir sintiendo en su corazón el ser docente. Ojalá podamos seguir reflexionando por el único bien, que nos han encomendado, que son nuestros alumnos".

Luego fue entonado el himno a Sarmiento, coreado por los presentes.